Autor: Mathieu Reynès.
Editorial: Dibbuks.
Fecha edición española: marzo 2019 (Francia: 2016)
Formato: Libro cartoné, 192 págs., color.
Colección: 1 tomo (abierta).
Precio: 28 €
Harmony es una joven que acaba de despertarse en un sótano oscuro, donde su captor le da de comer y unas pastillas. No recuerda nada de lo sucedido.
Harmony es un cómic sobre niños con poderes telequinéticos. En su planteamiento no es muy novedoso y vemos, al menos en este primer ciclo, lo típico de estas historias, experimentos, gobierno, etc. Pero la verdad que, aunque sea una trama manida, se deja leer bastante bien y engancha.
El integral de Dibbuks recopila los tres primeros álbumes franceses que corresponden al primer ciclo. El primer álbum corresponde con la presentación, el ritmo es bastante pausado, pero se centra casi todo el momento en saber sí Harmony está en peligro o no, una situación que lleva bastante bien y hasta el final no sabes qué ocurre. El segundo nos da mucha información sobre las preguntas que te haces al acabar el primero. Y en el tercero, se pone rumbo hacia lo que será la serie, con un capítulo lleno de acción y donde conocemos todas las fichas que tomarán parte en la historia.
Además de la historia de Harmony, en este primer integral hay unas pocas páginas de una historia que ocurrió 4.000 años antes. Vemos una civilización antigua que también tienen diversos poderes. No sé si esto se desarrollará más o quedará como una breve historia que podría ser independiente, aunque en estos primeros álbumes la trama está bastante bien hilada, por lo que seguro que tendrá relación lo del pasado con el presente.
La historia está muy bien contada y eso hace que, aunque la trama sea algo típica, en cuanto empiezas a leer no puedas parar. Maneja muy bien el ritmo y está todo muy medido, tanto los diálogos, como las escenas de acción. También está muy bien resuelta la manera en la que nos va dando información de todo lo que pasa, no espera a haber avanzado infinidad de números para descubrir una pieza del puzle, sino que poco a poco, sobre todo a partir del segundo capítulo, empezamos a descubrir muchas cosas, lo que hace que no pierdas el interés rápidamente.
En cuanto a personajes, tenemos a Harmony, la chica protagonista que también tiene una actitud típica de estas historias, pero que tiene carisma y es bastante creíble. A su alrededor tenemos varios personajes que también están bien retratados aunque van hacia estereotipos básicos.
Del dibujo se encarga el propio Mathieu Reynès, con un dibujo caricaturesco bastante bonito. Son expresivos y tienen bastante movimiento, sobre todo Harmony, que es la que, para mí, mejor diseño tiene. Aunque todos los personajes tienden a la caricatura, hay diferencias entre unos y otros, mientras que la gente del gobierno o investigadores tienden hacia el realismo, otros como Mahopmaa son mucho más caricaturescos, su diseño depende del rol que tenga dentro de la trama, pero todos siguen el mismo estilo. El dibujo es detallado, con fondos trabajados sobre todo en entornos naturales, donde tanto dibujo como color crean unas viñetas muy bonitas.
Dibbuks edita este primer ciclo en un integral con tapa dura y extras al final donde vemos algunos bocetos. La edición como es propio en esta editorial está bastante bien.
Harmony me llamó la atención por el apartado gráfico, la portada me parece bastante potente, y aunque suponía que la trama podía ser algo vista la obra se lee muy bien y te lo lees prácticamente del tirón. Maneja el ritmo bastante bien, manteniendo el suspense cuando tiene que mantenerlo o revelando información sin dar excesivos rodeos, hace que la serie vaya directa y no te sobre ninguna parte. Este primer ciclo, pese a ser introductorio para lo que venga a partir de ahora, te da la sensación de haber descubierto mucho y te quedas con un buen sabor de boca. Mathieu Reynès había firmado por otros tres álbumes más, que supongo que será el segundo ciclo, actualmente en Francia tienen publicado cinco álbumes, por lo que no tardaremos demasiado en ver el segundo integral de Dibbuks.
Lo mejor
– Un buen ritmo y no da muchos rodeos para dar respuestas.
Lo peor
– Aunque entretiene mucho, la trama es algo manida.
Valoración de CC.
– Bueno